Un passepartout es una decoración intermedia que se coloca entre el cuadro y el marco exterior, y es una excelente manera de potenciar la belleza de una obra de arte. Sin embargo, no es necesario poner un passepartout en todos los cuadros. Hay algunos factores a considerar, tales como:
- Tamaño de la obra de arte: Un passepartout es una buena opción para obras de arte de tamaño mediano o pequeño. Para cuadros más grandes, este elemento puede hacer que el cuadro se vea poco equilibrado.
- Estilo de la obra de arte: para cuadros con diseños elaborados o detalles complejos suele ser una buena elección. Para cuadros con diseños simples o minimalistas por lo general, no se recomienda usarlo.
- Color de la obra de arte: Si el cuadro tiene colores brillantes o contrastantes, es posible que un passepartout realce la obra. No así para cuadros con colores suaves o de tono uniforme.
- Estilo de decoración: Si buscamos un estilo más formal o tradicional el passpartout ayudará a crear este ambiente. Si la estancia tiene un estilo más moderno o minimalista, quizá no encaje tanto.
En resumen, decidir si poner un passepartout en un cuadro depende de las características de la obra de arte y de tus preferencias personales. Considera el tamaño, el estilo, el color y el espacio en el que deseas colgar la obra de arte, para elegir si es adecuado o no. Un passepartout bien elegido puede enfatizar la belleza de una obra de arte.
